Pintando

5 comentarios:

Mila dijo...

Mmmm... ¿Una caja para guardar tesoros? ¿Sueños de gatos y ensueños de humanos? ¿Una piedrecilla que le sale al paso al caminante de esos paisajes tan distantes y a la vez tan cercanos? ¿El apunte garabateado deprisa en una hoja suelta de lo que nos susurró una fada?

Qué bonita. O bonito. Sea lo que sea, es un capricho. Nocturno. De Luna, estrellas y gato.

Un abrazo a todos los habitantes de la casa en el aire.

Hice algo en el mensaje que salió mal y borré lo que quedó. Es cosa de la fada, por mencionar que susurró algo

Mila dijo...

¡¡Lo sé, lo sé, lo sé!! Es para guardar sueños, sí. Los que saldrán de los pinceles que vas a meter ahí. ¿Sí?

Lo dejo ya, que a estas horas no sé lo que me digo...

Chema Lera dijo...

Mila, estas fadas traviesas a las que convocas con tu espíritu de fantasía... Es una caja para sueños, pinceles y papeles de momentos mágicos, sí, pero no los míos...
Es un dibujo de artesano, es muy bonito pensar que estos dibujos acompañan objetos y prendas estimadas por gente amiga...

Mila dijo...

Y tanto que es bonito pensar eso mientras realizas un trabajo con cariño.

Y para la persona que lo reciba, debe de ser el no va más.

Yo también tengo una cajita pequeña, pintada a mano, que me regaló una amiga. Y ahí guardo cositas pequeñas de tamaño y grandes en sensaciones.

Entrar a la casa en el aire es un respiro, porque el día de ayer fue de esos que prefieres pasar página y correr un 'estúpido' velo sobre él.

Hoy ya es hoy! Bien!

Gracias, gata sabia ;)

Chema Lera dijo...

El aire entra en la casa frío y descarado, y cuando sale, se lleva todo aquello que a las almas no les sirve, para lanzarlo lejos, más allá de las nubes.
Mila, ven siempre que quieras a renovar ánimos!
Un abrazo, amiga!