Cocinamos sin crueldad II. Pimiento rojo pasión.

L@s gat@s y yo seguimos cocinando sin crueldad, recetas en las que no se hace sufrir ni se explota a ningun animal no humano. Nos sumamos al proyecto colectivo de CSC en internet. La propuesta de este mes, de sika de New vegan goddess , no sé por qué ;) es cocinar algo con un elemento rojo. Yo creo que de lo que se trata es de cocinar algo con amor, con corazón grande, como el de los que aman a los animales.

Pimiento "rojo pasión"

Ingredientes:

Pimientos rojos grandes

Pimientos verdes

Cebollas

Ajo

Perejil

Orégano

Sal

Opcional: tomate triturado natural


Esta es una receta de las antiguas, en las que el tiempo es el principal ingrediente, aliado con el fuego rojo y la vida sencilla.

Se disponen los pimientos rojos grandes, dos o tres, en una cazuela de barro. Se les echa un chorro de aceite de oliva y un poco de sal. Se ponen a fuego lento. Nosotros lo hacemos en la estufa de leña, mientras los gat@s dormitan al lado.

Se cortan a tiras los pimientos verdes y la cebolla. Se pelan unos ajos y se echa todo en otra cazuela llana de barro con una pizca de sal y un chorro de aceite de oliva. Opcionalmente se puede sofreir con tomate triturado natural (esta vez no lo hemos hecho así).
Se pone a fuego lento en la estufa de leña si es posible, o en otra fuente de calor, hasta que se hagan bien.

Se deja asar el tiempo necesario, cuidando que no se quemen los pimientos rojos y que vayan soltando su jugo. De vez en cuando se les da la vuelta. No puedo dar un tiempo exacto, sobre una hora o así, pero sin prisas, hasta que veamos que los pimientos están blandos y el color se ha rebajado.
Se sacan del fuego y se pelan con cuidado de no romperlos. Primero se les quita el tallo tirando, y con una cuchara se limpia el interior sacando las pepitas.


Cuando el sofrito de pimiento verde y cebolla está hecho y jugoso, se coge a cucharadas y se rellena el interior del pimiento rojo ya pelado, muy delicadamente para no romperlo y que conserve su forma de corazón..
Se espolvorea orégano seco y perejil por encima y se sirve caliente.

No sé por qué extraña razón el olor a pimiento asado siempre lo relaciono con una cena al calor del fuego, y una cama calentita, con dos o tres edredones por encima...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta este blog que es como un laberinto, como un juego infantil con gatos, con dibujos, con comida, con naturaleza, ¡todo mezclado!!!! :)jajaja!!! Es un pequeño pais de las maravillas :D
Un abrazo de Alicia;)

Maria Luisa Adães dijo...

E depois dessa delicia que nos apresentas, mais uma pitada forte de Amor.O blogs encanta o caminhante...

Maria Luísa

:chemalera: dijo...

Alicia, gracias por venir al otro lado del espejo;)

:chemalera: dijo...

Maria Luisa, obrigado por andar por aqui, bem-vindo, a cozinha livre do sofrimento dos animais só pode ser feito com amor, você está certo.

(La traducción facilitada por Google de "Maria Luisa, gracias por caminar hacia aquí, bienvenida; la cocina libre de sufrimiento animal solo puede hacerse con amor, tienes razón")